Moscú guardaba este martes un día de luto oficial mientras sus habitantes volvían nerviosos a viajar en metro, en tanto el total de muertos por el doble atentado suicida del día anterior subió a 39.
Las banderas ondeaban a media asta en la capital rusa y los moscovitas depositaban flores o encendían velas en las dos estaciones afectadas por los atentados, atribuidos a rebeldes del Cáucaso Norte.
La presencia policial fue aumentada en las estaciones de metro de Moscú y la seguridad también se reforzó en las redes de transporte de ciudades como San Petersburgo o Novosibirsk en Siberia, según medios locales.
En radio y televisión se eliminaron los programas de entretenimiento por el día de luto por las víctimas del atentado más mortífero en la ciudad en los últimos seis años, llevado a cabo por dos mujeres suicidas.
Los trabajadores acudían cautelosos al metro en la mañana posterior a las explosiones en plena hora pico matinal en trenes llenos de pasajeros en las estaciones de Lubyanka y Park Kultury.
"Cuando iba en el metro hoy empezó a sonar el reloj electrónico de alguien y pensé: "Ahí está", dijo la estudiante Katya Vankova. "Me dio mucho miedo", agregó.
En ambas estaciones se montaron altares improvisados. En Park Kultury, la gente dejó claveles rojos y moños blancos en un andén cerca de donde estalló la bomba, mientras que algunos se persignaban al pasar por el lugar.
Señal de sombra
Los atentados enviaron una señal sombría tanto al presidente Dmitry Medvedev como al primer ministro Vladimir Putin.
Según algunos medios, representan el fracaso de la política gubernamental de seguridad. Años de propaganda oficial han adormecido a los rusos, haciéndoles creer que hay poco que temer de la insurgencia islamista en la turbulenta región del Cáucaso Norte, de mayoría musulmana, añadieron.
Una joven herida murió en la madrugada del martes, llevando el total de muertos a 39, según dijo en la televisión estatal Rossiya 24 Andrei Seltsovsky, jefe del departamento médico de Moscú.
Seltsovsky agregó que 71 personas más están internadas, cinco de ellas en estado crítico, y que 8 de las víctimas han sido identificadas. Según las autoridades, las bombas estaban repletas de barras y tornillos.